martes, 15 de enero de 2008

LA DESTRUCCION DE LOS RECURSOS FORESTALES, UN PROBLEMA LATENTE.


El Alto Mayo (provincias de Rioja y Moyobamba, de partamento de San Martín-Perú), en la década del 70, con la apertura de la Carretera Marginal Olmos-Moyobamba-Tarapoto, la existencia de un enorme potencial de recursos forestales, los problemas demográficos, la escasez de tierras y la falta de oportunidades de trabajo en otros departamentos del País, se originó hacia esta zona una fuerte corriente migratoria que no pudo ser controlada y que alcanzó características alarmantes, agudizando los problemas por la posesión de las tierras y el deterioro del medio ambiente, con impactos negativos en el ámbito económico y social. Dejándose sentir mas en la provincia de Rioja, por los centros poblados que surgieron como Nueva Cajamarca y Segunda Jerusalén a ambas márgenes de la Carretera Marginal, que en el período 1981-1993 alcanzó un crecimiento poblacional de 5.3%, el mas alto de la Región San Martín y del País (INEI, 1994).

Estos migrantes, en sus inicios ocuparon las tierras bajas con aptitud para cultivos intensivos, posteriormente, ante la saturación de las primeras, se fueron asentando en tierras marginales explotadas bajo prácticas de tumba y quema, para cultivos principalmente maíz, arroz, café, plátano, etc., creando una presión constante sobre los ecosistemas naturales, territorios de comunidades nativas, áreas naturales protegidas y tierras de limitado potencial agropecuario, que debido al uso itinerante y desordenado de los recursos naturales, creó serias alteraciones a la estabilidad de las microcuencas.

Pese a la presión sobre sus tierras y a los problemas ambientales, el Alto Mayo sigue siendo una zona de muchas posibilidades y con un potencial forestal muy importante, que está representado por los productos del bosque y por los servicios que este presta que, bien administrados y con políticas claras para su manejo, pueden tener un valor sumamente decisivo para la economía de la zona y de la Región San Martín.

En esta zona no existen Bosques de Libre Disponibilidad, parte de este potencial forestal se encuentra en los territorios de las 14 comunidades nativas de la etnia Aguaruna o Awajún, que se ubican en las partes altas y ambas márgenes del río Mayo, cerca de 150,247 Ha. de tierras con bosques (18.92% de la superficie del Alto Mayo), y parte en las cuencas media y alta de los tributarios del río Mayo, que en conjunto pueden significar un estimado de 40 ó 50% del potencial forestal para el Alto Mayo.

No obstante este potencial maderero, un gran porcentaje de la población no tiene acceso al bosque, es decir, no veen en el bosque una fuente de ingresos, por lo tanto no pueden beneficiarse, solo unos pocos aprovechan este recurso. Pero todo esto podría revertirse a través de una política forestal que promueva el manejo forestal comunitario de estos bosques, incorporando a las poblaciones rurales indígenas y mestizas a las actividades de producción y conservación de los recursos naturales, ya que los objetivos del manejo forestal son la conservación de la biodiversidad, la protección de las cuencas hidrográficas y la producción de madera.

Sin embargo, desde el año 2000 se viene produciendo en esta zona un fenómeno de deforestación mucho mas agresivo que los anteriores, el alquiler de tierras por agricultores migrantes en territorios de gran parte de las comunidades nativas, primero para la siembra de papaya, luego de dos años para la instalación de cultivos permanentes como el café, por 8 a 10 años, para lo cual miles de hectáreas de bosques estan siendo destruidos a un ritmo alarmante, despejando el suelo para instalar cultivos, pastos, para obtener madera y para improvisados asentamientos humanos.

La deforestación en esta zona esta llevando a la destrucción de los suelos por la erosión, la pérdida de los recursos acuíferos, serios trastornos climáticos y la extinción de muchas especies de plantas y animales silvestres y una gran pérdida en dinero, porque la mayoría de los árboles talados no se aprovechan sino quemados, agravando aún el problema ambiental, por cuanto no existen iniciativas (proyectos) para la recuperación de las tierras degradadas mediante plantaciones a gran escala con fines comerciales o de protección.

Frente a esta complejidad de problemas, el Proyecto Especial Alto Mayo (PEAM), la Cooperación Técnica Alemana (GTZ), CONDESAN, la Universidad Nacional de San Martín, entre otras, vienen trabajando en varias iniciativas, entre ellas el Pago por Disponibilidad de Servicios Ambientales Hídricos en Microcuencas, la promoción del ecoturismo, con avances muy significativos, este último como una política de conservación de las Aeas de Conservación Municipal (ACM), resaltando el ACM Asociación Hídrica Aguajal Renacal del Alto Mayo (AHARAM).

También el manejo forestal en 3 comunidades nativas, uno en ejecución en la comunidad nativa Huascayacu y dos planes de manejo elaborados para las comunidades Alto Mayo y Shimpiyacu (anexo Huasta y Selva Paraíso respectivamente). Actividad que el PEAM viene ejecutando con el asesoramiento del Servicio Alemán de Cooperación Social-Tecnico (DED) y con el apoyo de la Federación Regional Indígena Awajun del Alto Mayo (FERIAAM), un organismo que agrupa a las comunidades nativas de esta zona.

Paralelamente se esta recibiendo el apoyo de otras instituciones como el CAAAP y la WWF en materia de resolución de conflictos y la certificación forestal, que pueden contribuir a mejorar la calidad de la gestión y el aprovechamiento de los recursos forestales bajo los principios de la sostenibilidad.

Otro de los aspectos positivos, frente a tanta destrucción de los bosques, es la creación de Areas de Conservación Municipal (ACM), como sabemos, la mejor forma de conservar y proteger los recursos naturales es a través de las Areas Naturales Protegidas en sus diferentes categorías. En el Alto Mayo, el PEAM ha contribuido a la creación de 15 ACM y un Bosque Local, "El Maronal de Atumplaya". Algunas de estas ACM cuentan con Plan Maestro como el ACM AHARAM, actualmente en implementación y el Bosque Local, manejado por un Comité de Gestión Local. En ambos casos, con la participación activa de la sociedad civil.

No hay comentarios: